Bolivia, 8 de mayo de 2025 – Nada, una joven nacida en Hospitalet de Llobregat, Barcelona, fue víctima de un dramático secuestro a los 9 años cuando su vecino, Grover Morales, se ganó la confianza de su familia y la llevó a Bolivia bajo el pretexto de unas vacaciones. Al llegar al país sudamericano, el hombre destruyó su documentación y la mantuvo cautiva durante siete meses en la selva del Chapare, sometiéndola a trabajos forzados, maltratos y condiciones extremas de supervivencia.

Durante su cautiverio, Nada fue obligada a trabajar de sol a sol en plantaciones de coca y piña, y a convivir con su captor como si fuera su esposa, según relataron las autoridades e investigaciones posteriores. La niña sobrevivió en condiciones precarias, aprendiendo a defenderse, incluso matando serpientes con machete, y usando chanclas hechas de neumáticos. A pesar de la dureza de la experiencia, Nada nunca perdió la esperanza y se aferró a su deseo de volver a la escuela, manteniendo una libreta para estudiar inglés cuando podía.

El caso movilizó a las autoridades españolas y bolivianas, que coordinaron un complejo operativo de rescate. Finalmente, la Guardia Civil española, junto a la policía boliviana y la Interpol, logró liberarla en marzo de 2014 en una remota zona selvática, donde la niña dormía en el suelo y vivía en constante huida. Nada fue recibida con emoción al escuchar su nombre en castellano y pudo regresar a España tras el rescate.

El secuestrador fue detenido y condenado a 17 años de prisión por varios delitos, incluidas agresiones sexuales previas a otras menores de su entorno familiar. Nada, por su parte, ha relatado que el proceso de recuperación fue largo y difícil, pasando por varios centros de menores en España, donde continuó enfrentando retos emocionales y psicológicos.

Hoy, Nada comparte su historia como un ejemplo de resiliencia y superación, defendiendo la importancia del perdón y la necesidad de que la sociedad ponga el foco en la protección de la infancia, la dignidad y el acceso a oportunidades para los más vulnerables.