La Paz, 28 de agosto de 2025.- Un informe de la Dirección Nacional de Régimen Penitenciario revela que en Bolivia hay 1.297 personas privadas de libertad que llevan más de cinco años en detención preventiva sin recibir una sentencia condenatoria firme. Las regiones de Santa Cruz y La Paz concentran el 70% de estos casos, con 652 y 261 internos respectivamente.

Santa Cruz presenta la población más numerosa, albergando más del 50% del total nacional de preventivos con prolongada detención. Le siguen La Paz con 261 y Cochabamba con 237 casos. La mayoría de estos detenidos (1.270) son hombres, mientras que solo 27 son mujeres.

Los centros penitenciarios con mayor población en esta condición son Palmasola en Santa Cruz (310 hombres), El Abra en Cochabamba (224) y San Pedro en La Paz (219). Otras regiones también reportan cifras significativas, como Tarija, Beni, Chuquisaca y Oruro, mientras que Potosí no registra casos de preventiva extendida y Pando no figura en los datos.

Esta situación genera un desafío para la administración de justicia boliviana, que debe revisar sus mecanismos procesales para garantizar el derecho a la defensa y evitar la prolongación excesiva de las detenciones preventivas, en respeto a la presunción de inocencia y los plazos razonables de juicio, establecidos en la Constitución y tratados internacionales.

La Defensoría del Pueblo y el Tribunal Supremo de Justicia han iniciado instrucciones y jornadas de revisión para asegurar el cumplimiento de los plazos procesales, aunque el problema estructural del hacinamiento y la demora judicial persiste, con consecuencias negativas para los derechos humanos y la dignidad de los privados de libertad.