Estudiantes de la Universidad Técnica de Oruro (UTO) y transportistas de la ciudad de Oruro se vieron envueltos en enfrentamientos debido al reciente aumento de tarifas de pasajes impuesto por los transportistas. La tensión escaló cuando los estudiantes marcharon hacia la sede de la Federación de Transportistas «San Cristóbal» para manifestar su rechazo ante este incremento.
La protesta desembocó en disturbios, exacerbando las tensiones ya existentes desde la jornada anterior, donde se registraron destrozos tanto en la sede de los transportistas como en la UTO. Ante esta situación, las autoridades policiales intervinieron para dispersar a los manifestantes y establecer un cordón de seguridad alrededor de la sede del transporte.
El comandante departamental de la Policía en Oruro hizo un llamado a la calma, instando tanto a los choferes como a los estudiantes a cesar la violencia y buscar una solución dialogada. Se anunció una reunión para abordar el tema a las 4 de la tarde, con la esperanza de encontrar una salida pacífica a la situación.
Sin embargo, la negativa de la población a aceptar el aumento de pasajes ha generado una profunda molestia entre los transportistas, quienes afirman que las tarifas han permanecido congeladas durante años. A pesar de los reclamos de los universitarios, los choferes aseguran haber mantenido las tarifas sin cambios durante una década, mostrando su descontento por la falta de apoyo de la población.
A medida que se desarrollan los acontecimientos, los representantes de la universidad han anunciado que no asistirán a la reunión programada, optando en cambio por desplegar estudiantes en vigilias en las distintas facultades en respuesta a los disturbios y enfrentamientos ocurridos en las últimas horas.
El aumento de las tarifas de pasajes, establecido la semana pasada por los transportistas de Oruro, ha generado un clima de tensión en la ciudad, manifestado a través de bloqueos y protestas que reflejan la creciente incomodidad de la población ante esta medida. Los enfrentamientos violentos entre estudiantes y transportistas han marcado la jornada, dejando destrozos en la infraestructura de ambas partes y evidenciando la urgente necesidad de encontrar una solución pacífica y consensuada.