La Paz/Santiago, 20 de diciembre de 2024 – Chile y Bolivia consolidaron este viernes un histórico acuerdo que establece mecanismos conjuntos para el control migratorio y la seguridad en sus fronteras. Este pacto aborda especialmente el retorno de migrantes irregulares y refuerza la cooperación entre ambos países para combatir el contrabando y regular el tránsito fronterizo.
El acuerdo, que incluye ciudadanos de ambos países y migrantes de terceros estados, introduce procedimientos claros para gestionar los flujos irregulares. Una de las medidas clave es que si las autoridades chilenas detectan migrantes a menos de 10 kilómetros de la frontera, estos serán entregados a la Policía de Investigaciones (PDI), que los derivará a las autoridades bolivianas tras un registro biométrico.
Hasta ahora, Bolivia no permitía el retorno de migrantes irregulares desde otros países, lo que generaba tensiones en la gestión migratoria. Con este convenio, ambos estados se comprometen a aceptar el retorno de sus ciudadanos y de migrantes de otras nacionalidades.
Este acuerdo complementa las acciones adoptadas por Chile desde 2023, como el despliegue de tropas en la frontera y el uso de tecnología avanzada para controlar pasos no habilitados. Aunque Bolivia y Chile no mantienen relaciones diplomáticas a nivel de embajadores desde 1978, este pacto refleja un esfuerzo renovado de colaboración en temas críticos.
