Chapare, 31 de diciembre de 2024. Mientras Evo Morales permanece atrincherado en el Chapare bajo protección de las Seis Federaciones del Trópico, legisladores evistas como Gualberto Arispe y Leonardo Loza han emitido graves amenazas contra quienes intenten ejecutar la orden de aprehensión que pesa sobre el expresidente.

En un ampliado reciente, Arispe declaró: “Quien quiera venir a aprehender al hermano Evo, que venga, pero decidido a morir”. Loza, por su parte, lanzó un desafío directo: “Que sigan soñando con detener a Evo; que se atrevan y ahí veremos qué pasa”.

La Fiscalía de Tarija acusó a Morales por trata de personas agravada, y el expresidente ha evitado declarar, aumentando la tensión entre sus seguidores y las autoridades. A las amenazas de los legisladores se sumó el dirigente intercultural David Veizaga, quien advirtió que no se responsabilizarán por posibles incidentes con efectivos del gobierno.

Desde el oficialismo, el diputado Freddy Velásquez calificó las declaraciones de “alarmantes” y sugirió que se investiguen, mientras desde Comunidad Ciudadana, Alberto Astorga anunció que llevará las amenazas de Arispe ante la Comisión de Ética.