La Paz, 4 de julio de 2024 – En una conferencia de prensa realizada la noche de este miércoles, el ministro de Gobierno, Eduardo Del Castillo, confirmó la existencia del denominado «plan Boquerón», vinculado a la toma militar de la plaza Murillo. Este plan fue revelado hace un par de semanas por el expresidente Evo Morales.
Del Castillo explicó que el plan Boquerón tenía como objetivo principal que agentes militares de inteligencia realizaran un seguimiento minucioso a los comandantes de la Policía boliviana. “Se evidenció la existencia de un plan llamado Boquerón y que tenía el objeto de ejecutar operaciones de seguridad y defensa de instalaciones públicas. Hemos llegado a corroborar esta información de que había personal de inteligencia siguiendo a los comandantes de la Policía boliviana en sus domicilios y lugares de trabajo para analizar todos y cada uno de sus movimientos”, sostuvo Del Castillo.
El 16 de junio, Morales había advertido sobre este plan durante una entrevista en Radio Kawsachun Coca. «El comandante del Ejército (Zúñiga) ha lanzado un plan Boquerón. Hoy día tienen que hacer ejercicios del plan Boquerón, que significa que las Fuerzas Armadas en toda Bolivia deben estar en posición de apronte, frente a todas las movilizaciones que vienen desde el día lunes, desde mañana”, señaló Morales en esa ocasión.
Sin embargo, el excomandante del Ejército, Juan José Zúñiga, salió a desmentir la existencia de dicho plan. “Quiero negar categóricamente que existiera algún plan para reprimir a la población. Quiero recalcar que el Ejército tiene muchos planes, pero todos los planes están abocados a proteger al pueblo y principalmente a proteger a nuestra patria”, declaró Zúñiga.
El pasado 26 de junio, hubo un movimiento militar inusual en la plaza Murillo, liderado por Zúñiga, que el Gobierno ha calificado como un “golpe de Estado fallido”. Hasta la fecha, hay más de una veintena de detenidos relacionados con este incidente.
