Santa Cruz, 6 de diciembre de 2024 – Fue la madre de los menores quien, al regresar a su hogar, encontró el cuerpo sin vida de la niña en la cocina, una escena que desató su desesperación y gritos de auxilio.

La tranquilidad del barrio Buen Samaritano, en la zona de Los Lotes, se vio interrumpida por un desgarrador suceso que dejó conmocionados a toda los vivientes. Rafaela, una niña de 12 años, perdió la vida de manera brutal en su propia casa, presuntamente a manos de su hermano mayor, Mateo, de 14 años, quien ahora se encuentra aprehendido y bajo investigación.

El crimen ocurrió la tarde del jueves pasado, cuando los dos adolescentes se encontraban solos en la vivienda familiar. De acuerdo con el informe preliminar de la autopsia, Rafaela recibió 21 puñaladas, lo que provocó una muerte por desangramiento. Fue la madre de los menores quien, al regresar a su hogar, encontró el cuerpo sin vida de la niña en la cocina, una escena que desató su desesperación y gritos de auxilio.

“Me dijo mi madre que el niño la apuñaló a la niña y que su madre llegó y la pilló a la niña en el piso”, relató un vecino.

Vecinos del barrio relataron que esa misma mañana los hermanos fueron vistos juntos en una tienda cercana, donde compraron una gaseosa y, aparentemente, se comportaban con total normalidad, incluso jugando. “No esperábamos algo así; se los veía tranquilos”, expresó.

Según vivientes del barrio, después del hecho, el hermano mayor de 14 años agarró su bicicleta y abandonó la casa con rumbo desconocido, horas después fue aprehendido en inmediaciones de Tránsito sobre la avenida Santos Dumont.

El acto de matar a la propia hermana se denomina “soricidio”. Aunque este término no figura en el Código Penal boliviano, las autoridades investigan, para esclarecer las causas y motivaciones detrás de este acto atroz.