Noruega, 31 de marzo de 2025 – Un estudio realizado en Noruega reveló que utilizar pantallas en la cama por una hora incrementa en un 59 % el riesgo de insomnio y reduce en promedio 24 minutos el tiempo de sueño. La investigación, publicada en Frontiers in Psychiatry, analizó los hábitos de 45.202 jóvenes adultos y concluyó que no importa el tipo de contenido consumido, sino el tiempo total de exposición.
La autora principal, Gunnhild Johnsen Hjetland, explicó que el problema radica en la sustitución del tiempo de descanso por el uso de dispositivos, más que en la luz azul de las pantallas. Además, se identificaron cuatro formas en las que las pantallas afectan el sueño: interrupciones por notificaciones, reducción del tiempo de descanso, retraso en el inicio del sueño y alteración de los ritmos circadianos.
El estudio también desmintió que las redes sociales sean más perjudiciales que otras actividades frente a la pantalla. Por otro lado, las gafas o aplicaciones que bloquean la luz azul no garantizan una mejora en la calidad del sueño. La solución más efectiva es reducir el brillo o limitar el tiempo de uso antes de dormir.
Los investigadores aclararon que no se pudo determinar si el uso de pantallas provoca insomnio o si las personas con insomnio recurren más a ellas. No obstante, los hallazgos refuerzan la recomendación de apagar los dispositivos antes de acostarse para mejorar la calidad del sueño.