Sucre, 8 de enero de 2025 – Romer Saucedo asumió ayer la presidencia del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) durante el acto de inauguración del año judicial 2025, comprometiéndose a construir una “justicia amigable e independiente”. En su discurso, destacó la urgencia de transformar el sistema judicial para que los ciudadanos sientan atención con calidad y calidez, dejando atrás la percepción de que los procesos legales son un martirio.
Saucedo, de origen chiquitano, agradeció el apoyo obtenido en las elecciones judiciales de diciembre de 2024 y prometió no defraudar la confianza de la población, que exige cambios profundos en el sistema judicial. Subrayó la necesidad de mantener la independencia del Órgano Judicial, comprometiéndose a trabajar solo bajo los preceptos de la Constitución y las leyes.
Primeros retos y objetivos
La nueva Sala Plena del TSJ definió un plazo de seis meses para que la población pueda percibir diferencias significativas respecto a la administración anterior. Saucedo explicó que las prioridades incluyen eliminar la burocracia judicial, implementar tecnología para facilitar los procesos legales y garantizar una justicia más accesible y eficiente.
El presidente del TSJ afirmó que este nuevo periodo marca el inicio de una justicia renovada, enfocada en devolver la confianza ciudadana y asegurar que las casas judiciales se conviertan en espacios amigables y eficientes.